Orgía celebratoria de la dictadura

1975, año de la orientalidad. Vania Markarian, Isabella Cosse

Roberto Saban

Es una investigación que ya tiene 3 décadas. Se publicó por primera vez en 1996 por la editorial Trilce. En la sociedad uruguaya nunca se dejó de hablar de la dictadura, pero a veces ese tema en el debate público pasó a segundo plano. Una investigación sobre la Identidad, memoria, e historia de una dictadura. Hoy 23 de junio en la FHCE Uruguay 1695.

Las conmemoraciones tuvieron alguna significación en los aniversarios redondos. Como en los 30 y en 40. Las autoras, estudiantes de la Licenciatura de historia de la Facultad de Humanidades, – donde presentan ahora su libro- tuvieron la inquietud de para salvar algunas materias de la carrera, profundizar en ese año 1975.

El libro es una reedición de aquél originario. Se le han agregado fotos y cambió el prólogo.

¨ Decidimos meternos con este año de la orientalidad, del que nosotras no teníamos recuerdo, digamos, era para nosotros, si bien historia vivida no teníamos casi memoria directa. Porque éramos muy chicas. Teníamos recuerdos muy vagos¨

El régimen autoritario en Uruguay a poco del golpe de Estado del 73, solo 2 años más tarde se cumplieron los 150 años de la cruzada libertadora, o sea, de la fecha que el Estado nacional hacía tiempo se había dado por conmemorar la independencia.

El régimen desplegó una parafernalia de conmemoraciones históricas. Fue una orgía celebratoria ese año del 75.

Un año que fue extraordinariamente represivo en el que la dictadura realizó una avanzada destructiva contra los sectores populares y armó un paquete ideológico a todo nivel.

Lo primero fue eliminar la discusión y la polémica sobre cuando y como el Uruguay se había independizado. No se debate más el origen de la nación.

Recordar que, en esos momentos, a nivel mundial se estaba celebrando con gran pompa el bicentenario de la revolución francesa, también la conquista de América, que provocaron grandes discusiones.

Se inscribe en este año el proyecto del Mausoleo de Artigas, donde se subraya su imagen militar y autoritaria y la repatriación de los restos de Latorre.

Estallaron en todos los rincones del país celebraciones con el surgimiento de sociedades patrióticas o grupos folclóricos exaltando la nacionalidad. Todo el espectro cultural fue permeado con el apoyo de empresas privadas y ni que hablar de las campañas publicitarias y de empresas privadas.

Todos mantienen en la memoria aquella orden de que todo escrito, carta pública debía ser precedida por la frase 1975 año de la orientalidad.